Hace unos años fue la quinoa. En los últimos meses, le ha cedido su puesto a la chía como la nueva semilla reina, presente en todos los platos. La chía está cada vez más presente en la vida cotidiana, ocupando puestos de honor en el supermercado, pero, ¿qué sabes realmente de este cultivo?

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La chía era el tercer alimento más importante para las civilizaciones maya y azteca
La semilla de la chía es negra y blanca y destaca por su pequeño tamaño. Es rica en aceites y omega 3, lo que le ha otorgado una enorme popularidad. Es una planta bastante dura, capaz de resistir en situaciones duras y áridas, soportando altas temperaturas. De hecho, es bastante resistente a las sequías y crece, especialmente en suelos arenosos de buen drenaje.
Es bastante delicada a las heladas y florece tras el verano. El momento de la recolección es clave, pues, si es recolectada cuando aún está madura (la semilla es marrón) su contenido en aceites será menor.
Las semillas de chía contienen altas cantidades de hierro, calcio, antioxidantes, fibra, proteínas o potasio. Esto la hace enormemente atractiva para el consumo humano, y ha disparado sus ventas en los últimos tiempos. Sin embargo, la chía es muy indicada también para el consumo animal, más concretamente, en caballos, ya que sus nutrientes ayudan a prevenir cólicos y úlceras.
Fuentes:
https://ecocosas.com/salud-natural/10-asombrosos-beneficios-las-semillas-de-chia/
http://blog.cropti.com/cultivos-emergentes-chia/
http://www.semillasdechia.com/propiedades.html