El sector de la agricultura y pesca cerró 2018 con 138.771 personas desempleadas, una reducción interanual del 10,5 %, lo que supone la cifra más baja de los últimos seis años, según datos de los servicios públicos de empleo.
La agricultura intensiva se plantea como una posible respuesta al reto alimentario que se presenta de cara a las próximas décadas. Un estudio revela que podría ser más eficaz que los métodos de producción ecológicos y los tradicionales.